KOLLAS DE NUEVO. ETNICIDADES,
TRABAJO Y CLASIFICACIONES SOCIALES EN LOS ANDES DE LA ARGENTINA
Yudi, Raúl Javier
Purmamarka Ediciones, San Salvador de Jujuy (2015) 253
páginas. ISBN 978-987-3792-11-3.
Sobre la sociedad de hacienda y su
estructura social se ha escrito mucho.No obstante,
este libro propone una mirada innovadora al reconocer en la politización de
identidades indígenas en el Norte Argentino, el eje del proceso de
transformación desde “la
invención del coya” hasta la reivindicación del
Kolla. Según Yudi, esta metamorfosis
resulta de un proceso de identificaciones que, surgidas como etiquetas de subalternidad o categorías coloniales y poscoloniales,
están siendo reasumidas, revertidas y asociadas a reivindicaciones sociales.
El autor
entiende la etnicidad de manera relacional e históricamente cambiante, como un
indicador de las luchas por la posición, la organización y el reconocimiento
social, y no como un conjunto de rasgos exteriores o culturales. Desde esta
perspectiva, indaga sobre la formación de una estructura social étnicamente
segmentada (ibérico, criollo, indio, mulato, zambo, etc.), y una sociabilidad
donde la mezcla, la interdependencia económica y el mestizaje social fueron
constantes, considerando que lo étnico y lo económico nunca fueron por caminos
diferentes. El objetivo de Yudi en este libro, es
demostrar que, en el fenómeno de invención del coya, se evidencian procesos de
configuración de clases a partir de la etnización y
la racialización de las diferencias.
¿Desde
cuándo se empieza a denominar coya a la población mayoritaria de la región? ¿En
base a qué atributos se la califica de ese modo? ¿Cuáles fueron los factores
que intervinieron en la segmentación étnica de la población del Norte
Argentino? ¿Qué tipo de actores sociales intervinieron en ese proceso de
clasificación? ¿Ha sido la etnicidad un factor importante para la integración
de las poblaciones andinas de la provincia en los mercados de trabajo, y en la
manera en que la región se ha integrado a la economía nacional? ¿Qué ha
cambiado en la actualidad? ¿Por qué se están dando estos procesos de
re-identificación o de reversión de identidades negativas?
La estructura del libro se compone
de siete capítulos que, en términos generales, tienen una perspectiva
antropológica, aunque se nutre, de manera secundaria, del análisishistórico
para contextualizar la emergencia de los actores sociales y las condiciones en
que tiene lugar la invención de lo coya. En los primeros cuatro capítulos,
el autor desarrolla históricamente el proceso de organización social del Noroeste
Argentino, y reflexiona sobre las representaciones sociales que crearon el mito
de la Argentina blanca, europea, durante el proceso de organización del Estado
Nación, en tensión con la herencia de la sociedad colonial, que refleja una
sociedad diversa y mestiza. En el capítulo cinco, analiza las formas de
organización del trabajo y reclutamiento de la mano de obra en los ingenios y
plantaciones azucareras, y el tipo de relaciones que caracterizaron la
integración al mercado nacional y al concierto de las clases dominantes del
Estado moderno argentino. Si bien en este capítulo la caracterización de la
estructura productiva no es novedosa, el autor logra, a partir de la cita y
análisis de entrevistas realizadas a los trabajadores de la región, identificar
las diferentes percepciones puestas en juego en el mundo de la agroindustria, resultado
de la división étnica que colocaba a los trabajadores frente a variadas y, a
menudo, desiguales relaciones de trabajo.
A partir de una necesaria
reconstrucción histórica para contextualizar y situar al lector, social y
territorialmente, sin embargo, la propuesta más interesante del libro de Yudi está en la parte final. En los últimos dos capítulos, el
autor considera que, en la sociedad de hoy, el resurgimiento de lo Kolla es el resultado de
procesos de politización de la etnicidad. Analiza los momentos de organización
y lucha desde finales de los años 1980 en el Noroeste Argentino, cuando
movimientos reivindicativos de la identidad Kollaganaron
la agenda pública y,en consecuencia, surgió una
juventud e intelligentsia
indígenas producto de nuevos contextos socioeconómicos que reactualizaron el
conjunto de demandas y re-significaron de manera permanente la lucha cultural.
En este
punto, el autor reconoce la construcción de una nueva subjetividad andina
positiva. En el proceso de organización y toma de la palabra ante la sociedad y
el Estado, estos movimientos asumieron la capacidad de auto-designarse, auto-nominarse
y describirse. Aquí Yudi identifica un nuevo actor
que juega un rol clave en la conformación de las identidades indígenas Kollas: los jóvenes, la intelligentsia indígena. Aquellas generaciones que
nacieron fuera de la lógica de la sociedad de hacienda, de modo que muchas de
las cuestiones que a las generaciones anteriores les otorgaban una especie de
“seguridad ontológica” entraron en crisis, permitiendo que la identidad
emergiera como problema, manifestándose en tres dimensiones: identidad
simbólica (rasgos étnicos), identidad colectiva (lazos de solidaridad) e
identidad pública (síntesis de los intereses del colectivo en el lenguaje y reglas
del espacio público), reconocida por el autorcomo el
principal producto de la intelligentsia
indígena.
En
síntesis, en este libro la identidad social es entendida como contingente, como
una lucha ininterrumpida por distinguir rasgos y grupos, y por otorgar sentido
a las diferencias. En el Norte Argentino la cuestión social era también una
cuestión étnica. Y en este punto, coincido con el autor, las diferencias
sociales y de clase tenían una justificación étnica, donde la clase no estaba
determinada por el lugar a ocupar en la estructura productiva, sino por el
origen étnico de los trabajadores, que determinaba, en última instancia, las
relaciones de trabajo.
En el marco de los cambios que la política
social sudamericana vive en los últimos quince años respecto de la cuestión
indígena, este libro presenta de manera provocativa un análisis histórico
actual, que reivindica la idea de la identidad como proceso dinámico y
cambiante, poniendo el énfasis en la organización como punto de partida, para
que el conjunto de demandas y luchas por el reconocimiento de las culturas
indígenas trascienda los reclamos históricos situados, y se re-signifique de
manera permanente.
Mg. Antonela Centanni-
Centro
de Estudios Indígenas y Coloniales, Facultad de Humanidades y Ciencias
Sociales- Universidad Nacional de Jujuy- antonela.centanni@gmail.com