Victoria Cohen Imach, Entre velos. Mujeres y vida religiosa en textos de Juana Manuela Gorriti y otros escritos del siglo XIX, Prohistoria Ediciones, Rosario, 2017, 472 pp. - Col. Iglesias y Religiosidades 3 . ISBN 978-987-3864-57-5.

 

            En “Entre velos” la Dra. Victoria Cohen Imach nos invita a recorrer, la escritura de Juana Manuela Gorriti, Flora Tristán y  otros autores del siglo XIX, y realiza una propuesta especial; rastrear las representaciones sobre la vida de las mujeres religiosas en el período tardo colonial  y el siglo XIX en los ámbitos de los actuales territorios de de Perú, Bolivia y Argentina.

 

            El libro se estructura en dos partes, la primera titulada Cuestionamientos de lo claustral  nos ubica en el contexto de la transición de la segunda mitad del siglo XVIII al XIX, proporcionando claves para comprender el proceso de textos literarios que manifiestan representaciones sobre la vida religiosa femenina, en la prensa, el teatro y en  autores  como Flora Tristán o Francisco de Paula González Vigil. La segunda parte  se centra en la producción de Juana Manuela Gorriti  y aborda las imágenes de la vida claustral en toda su obra  y en su correspondencia con Ricardo Palma.

 

            Los textos analizados, nos introducen en los espacios vedados de la clausura monástica, las casas de recogimiento,  los beaterios o los hospicios del período tardo colonial y en la vida de las nuevas congregaciones entregadas a la caridad pública de fines del siglo XIX. Estos lugares se nos muestran en su complejidad, preñados de contradicciones, sujetos a las lecturas más diversas. El libro de Victoria abre un mundo oculto y misterioso de la vida en los claustros, pero también nos introduce en la mirada que sobre ellos tuvieron autores impregnados del pensamiento ilustrado y anticlerical propios de la cultura decimonónica en claro proceso de secularización.

 

            ¿Que ven estos escritores y principalmente Flora Tristán y Juana Manuela Gorriti, en estos espacios rodeados por muros a veces infranqueables del mundo colonial?

 

            Para responder a esta pregunta la Dra. Cohen Imach realiza en su escritura un juego de escalas, utilizando un zoom, enfocando lo micro y lo macro: mira la vida singular de mujeres enclaustradas a la vez que pretende explicar desde una perspectiva de larga duración, los cambios de mentalidad operados entre el derrumbe del mundo colonial americano y el proceso de organización de los estados-nación en la segunda mitad del siglo XIX, sin dejar de buscar explicaciones en las transformaciones europeas de la pos revolución francesa y en la producción literaria de ambas márgenes del Atlántico.

 

            A través de los textos tan minuciosamente analizados llegan a nosotros una enorme cantidad de relatos que comunican la intimidad de las mujeres consagradas a Dios, sus sentimientos, las motivaciones para ingresar en el convento, hacer su consagración religiosa y su vida cotidiana.

 

            En este paisaje íntimo, Cohen Imach va pintando el marco más amplio, haciendo referencia a batallas, cambios políticos y a las profundas transformaciones culturales.

            Recorre una amplia gama de producciones historiográficas que buscan explicar el proceso de transformación de la esfera religiosa en los estados modernos nacientes en Latinoamérica, que provoca un desplazamiento hacia una mayor autonomía de ciertas concepciones, instituciones o funciones sociales respecto de la autoridad eclesiástica. También dibuja los trazos de una secularización individual visible en las escritoras y en algunas de las religiosas analizadas, en las que se pone de manifiesto la pérdida de referencias a las autoridades religiosas en sus conductas individuales y en la manifestación de posturas críticas respecto de la Iglesia, el clero o las prácticas devocionales.  Este proceso de secularización conlleva a su vez una subjetivación de las creencias y la recomposición del hecho religioso en los actores que emergen en el paisaje conventual.    

 

            El recorrido que Victoria Cohen realiza por las producciones literarias principalmente busca recrear los contextos de producción de cada obra, aproximando al lector una gran cantidad de herramientas que le permitan comprender mejor los temas abordados.

 

            La autora hizo una lectura exhaustiva de los textos y sus autores y de  quienes los estudiaron, a la vez que ha rastreado las investigaciones sobre historia de la iglesia, historia de la vida religiosa e historia política de Perú, Bolivia y Argentina, escenarios de la vida conventual representada. Por ello puede brindarnos un trabajo tan erudito y a la vez tan bellamente escrito.

 

            Los claustros en el mundo tardo colonial y de la primera mitad del siglo XIX, tenían la función social de ser un lugar de destino de las mujeres cuyas familias no podían otorgar la exigente dote necesaria para realizar un matrimonio conveniente. Las narradoras del siglo XIX describen en sus ficciones un sin fin de motivaciones para ingresar a un convento: la dificultad de lograr un matrimonio conveniente, un desencanto amoroso, un amor imposible, el cumplimiento de una promesa hecha a Dios por la curación un familiar enfermo, la necesidad de expiar las propias culpas o la de sus familiares, el haber sido víctimas de la violencia sexual, para preservarse de la misma o esconder un crimen. Para el caso de mujeres seglares que también habitaban al interior de los muros, un matrimonio destruido, la infidelidad o el embarazo que había que ocultar, fueron causales de ingreso.

 

             A su vez el convento es visto como un lugar de transgresión, relajación de costumbres o vida mundana a la vez que  por el contrario se lo caracteriza como un ámbito de  austeridad y rigorismo. Sin embargo las autoras dan cuenta de otras mujeres que ingresan por decisión autónoma aunque son acusadas de ilusión y fanatismo religioso.

 

            El espacio conventual es descripto en los textos de Flora Tristán y Juana Manuela Gorriti,  como cementerio, tumba, oscuridad, ámbito lúgubre, sin luz, una cárcel donde es difícil respirar.

 

            Los textos analizados revelan un cambio de mentalidad en las nuevas autoridades de los estados modernos en gestación a mediados del siglo XIX y de la nueva legislación que promueve la autonomía, el respeto por la ley natural y los derechos civiles de las mujeres enclaustradas. La elaboración de decretos que permitían la nulidad de los compromisos asumidos  y la libertad para regresar “al mundo”, dejando “la ociosidad” para convertirse en personas “útiles” a la sociedad, son muestra de esta transformación. Así el espacio del claustro se convirtió en un espacio de disputa entre el poder civil y el eclesiástico, teniendo las mujeres que acudir a las nuevas autoridades civiles para poder liberarse de los compromisos asumidos ante la negativa de obispos de dispensarlas de los mismos. Tal es el caso de la desgarradora historia como de Dominga Gutiérrez quien inmersa en un profundo pesar, trama una terrible fuga del convento que es su prisión, “el domicilio de sus angustias”.

 

            Pero también estos textos expresan que el espacio de lo claustral es visto como un lugar de vinculación con lo divino, un recinto de paz, sosiego, posibilidad de libertad, un ámbito donde tomar las propias decisiones y evitar los matrimonios impuestos por sus familias o los roles tradicionalmente asignados a las mujeres de ser esposas, madres o hijas. Así la elección de la vida claustral y el orgullo de mantenerse firme en esa decisión, ponían de manifiesto que estas mujeres al sustraerse de los roles sociales atribuidos, mostraban una gran capacidad de autonomía en sus acciones.

 

            Los últimos relatos analizados reflejan las transformaciones de la vida religiosa femenina, al arribar a Perú provenientes de Francia,  las hermanas de la Caridad. Estas religiosas se dedicaban al cuidado de los enfermos en los hospicios, a la atención de los huérfanos o a la educación y provocaron un giro en las mentalidades mas secularizadas: las nuevas religiosas a diferencia de las enclaustradas, fueron vistas como útiles al estado y a la sociedad moderna, heroínas de la solidaridad con los más pobres. Sus  prácticas solidarias de protección de niños y mendigos era la razón de sus vidas y la religiosidad de estas mujeres fue vista como “piedad social” de gran utilidad pública.

 

            Sin embargo la crítica de fines del siglo XIX de la que se hace eco  Gorriti, acusa a las religiosas de falta de sensibilidad con sus vínculos primarios al abandonar a sus padres, madres y hermanos en pos de asumir cuidado del prójimo o de tener excesivo desapego a la patria natal, a la que abandonan para vivir como extranjeras en otras tierras.

 

            En resumen, Entre Velos de Victoria Cohen Imach  es un valioso libro que pone en escena la vida religiosa femenina desde las representaciones halladas en la escritura de Tristán y Gorriti –entre otros autores- y realiza una lectura poco usual de esas autoras, visibilizando protagonistas hasta ahora poco conocidos de la historia latinoamericana.

 

Cynthia Folquer

Instituto de Investigaciones Históricas

Prof. Manuel García Soriano

UNSTA